domingo, 7 de outubro de 2012

Desde que Thiago Llegó a Chile...*

Desde que Thiago llegó a Chile se produjeron varias alteraciones territoriales dignas de tomarse cuenta. El llamado viento puelche cambió invisiblemente de rumbo y formó figuras romboidales en la Cordillera. El pulso del país se recobró como si despertara de una letárgica tristeza. Hacia Angostura de Paine se vio sobrevolar una bandada de pájaros amarillos que no eran canarios ni limones y volaban en forma extraña, como nadando en el agua celeste. También se observó en la arena de Isla Negra un precipitado calcáreo a la vez transparente y sonoro. Podemos atribuir estas variaciones a la influencia de Thiago Mello en nuestras almas. A la vez nuestras almas hacen cambiar el paisaje.
Thiago de Mello es un tranformador del alma. De cerca o de lejos, de frente o de perfil, por contacto o transparencia, Thiago ha cambiado nuestras vidas, nos ha dado la seguridad de la alegría. El tiempo y Thiago de Mello trabaian en sentido contrario, El tiempo erosiona y continúa. Thiago de Mello nos aumenta, nos agrega, nos hace florear y luego se va, tiene otros quehaceres. El tiempo se adhiere a nuestra piel para gastarnos. Thiago pasa por nuestras almas para invitarnos a vivir.
En en aquellas regiones florestales del magno Brasil hay también serpientes y gigantescos monos que no quieren a Thiago, allá ellos, les decimos. Nosotros lo queremos y lo conservaremos. Si son tan despil-farradores del talento, nosotros acogemos su deslumbrante talento. Si son tan ingratos con la obra de sus compatriotas excelsos, nosotros le oferecemos una patria clara como la luz y abierta como la palma de la mano.
Allá ellos con sus gigantescos simios que se han transformado en gobernantes, nosotros nos guardamos a Thiago para que su inteligencia y sua alegria sigan resplandeciendo. Chile acogió siempre al pensamiento perseguido. En eso estamos de acuerdo gobernadores y gobernados. El asilo contra la opresión no es sólo un verso, es el laurel de Chile, nuestro común orgullo.
Si este asilo te serve, Thiago de mello, aqui estamos tus amigos y hermanos para dártelo, aunque sim pedirnos permiso ya te asiló para siempre el corazón de nuestra bella Anamaria.
Yo voy andando por los mares a esta hora. Lejos pero no separado, distante pero infinitamente cerca.
Cerca de mis compatriotas de siempre y de nuestro nuevo compatriota, el poeta Thiago de Mello.

Pablo Neruda
En el mar, marzo 1965.

(Texto lido na homenagem prestada a Thiago de Mello pelos intelectuais, artistas e amigos chilenos por ocasião do afastamento do poeta do seu posto de adido cultural do Brasil no Chile.)

Nenhum comentário:

Postar um comentário